¿Cómo afecta la situación (Covid) a los niños en la escuela?

Una de las principales características del COVID-19 es que suele afectar con mayor agresividad a las personas mayores, llegando a ocasionar incluso la muerte. Sin embargo, cuando se trata de los niños, es posible que los efectos del SARS-CoV-2 se pasen como una simple gripe con los síntomas ya conocidos. Esto no quiere decir que los niños no puedan transmitir el virus, sino que, al contrario, pueden ser más propensos a contagiarse y contagiar porque la enfermedad no presenta síntomas fuertes, de hecho, en ocasiones, puede pasar inadvertida.

Por esta razón, al igual que las medidas de distanciamiento social aplicadas en diversos espacios, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha generado la propuesta de que en las escuelas se tomen medidas para evitar la propagación del virus, comprendiendo que en este espacio los niños conviven e interactúan de manera conjunta.

No obstante, a pesar de que la medida parece ser bastante efectiva para la protección de los mismos, esto ha generado ciertas implicaciones psicológicas en los niños que están acostumbrados a este entorno que forma parte de su espacio de socialización. Así pues, es común escuchar que los niños en caso presentan cuadros de ansiedad infantil o de inestabilidad emocional a causa de la incertidumbre generada por los efectos de la cuarentena y el confinamiento que les impide desarrollar las actividades que acostumbran realizar.

Efectos del cierre de las escuelas en los niños

Cabe destacar que, las implicaciones psicológicas que afectan a los niños están asociadas con las condiciones del entorno, comprendido de este modo que, cada una de las circunstancias particulares del infante en las diversas esferas de su vida puede tener consecuencias directas en su bienestar mental.

En este sentido, las diferencias de condiciones económicas y las posibilidades para continuar con las actividades según los parámetros o modalidades establecidas, pueden ser un motivo de estrés infantil que perjudica mayormente a los niños que se encuentran en condiciones desfavorecidas y que, no pueden tener acceso a los medios para sobrellevar las medidas de distanciamiento social en las escuelas.

Además de ello, deben considerarse otros elementos de gran importancia como la alimentación que, aunque muchas personas no lo crean, está directamente relacionada con el bienestar y la salud mental. En algunos casos, los niños tienen a su disposición un almuerzo escolar que les permite mejorar su desempeño, si no se cuenta con los recursos para sustentar la seguridad alimentaria del niño, es posible que los efectos se reflejan directamente en su desempeño, notando como disminuye el rendimiento académico y la capacidad de aprendizaje.

Otro aspecto importante es que los niños suelen aprender mejor cuando se encuentran acompañados y con el uso de las herramientas precisas para fomentar el aprendizaje, lo que es manejado de manera adecuada en las escuelas, por lo que es posible que a causa de la poca interacción entre ellos no se puedan emplear las mismas técnicas y procesos de aprendizaje que se acostumbran.

Todos estos elementos tienen consecuencias directas en el bienestar psicológico de los niños, por lo que es fundamental asegurarse de que las condiciones sean las adecuadas para evitar cualquier problema que pueda generar afectaciones graves en el rendimiento escolar.

Implicaciones del distanciamiento en clases tras el COVID-19

Desde los inicios de la pandemia, ha quedado demostrado que los niños y sus familiares han sufrido alteraciones en sus emociones a causa de la incertidumbre y el desconocimiento de un fenómeno mundial completamente nuevo que les ha impedido que las actividades escolares se realicen como se acostumbra, es decir, con interacciones entre los niños.

Ante esta situación, los niños han presentado diversas emociones dado que, el confinamiento y las medidas de distanciamiento han tenido ciertos efectos en ellos que los han vuelto más miedosos, ansiosos y obsesivos. En este sentido, desarrollar actividades en la escuela puede significar un verdadero estrés para estos niños que han debido adecuarse a todas estas condiciones nuevas, en especial si se considera que sus pensamientos pueden estar enfocados en las condiciones bajo las cuales se desarrollan sus actividades y se desenvuelve su cotidianidad, además de cuáles serán los nuevos retos a los que deben enfrentarse en estos espacios.

Para evitar colapsos y desbordes emocionales, es fundamental que los padres muestran su apoyo en cada etapa de este proceso de aprendizaje, dado que, de lo contrario, es posible que se generen problemas mayores que posteriormente requieran de tratamientos psicológicos especializados para asumir los efectos que ha generado el COVID-19 es relación a las medidas de distanciamiento tomadas en la escuela.

Así pues, en esta etapa crucial debe existir una preparación que permita al niño afrontar la situación, comenzando con una adaptación al espacio exterior, al igual que otorgar todas las herramientas posibles para que el infante pueda manejarse más cómodamente en la escuela bajo estas condiciones.