¿Cómo salimos del bucle de ansiedad que provoca el coronavirus hoy en día? Tras los meses de confinamiento estricto, hace ya más de uno año, los españoles vivimos en 2020 un verano tranquilo, aunque diferente y con muchos cambios en nuestras rutinas, pero agradable solo por el hecho de disfrutar de una libertad que se nos había limitado meses atrás.
El problema llegó cuando aparecieron las primeras olas y las restricciones se endurecían una y otra vez. Este tira y afloja lo que provocaba era una falsa sensación se seguridad, junto con una incertidumbre que nos provoca ansiedad y que terminaba poco después con un aumento de la incidencia en gran parte del país.
La última ola ha sido sin duda la más desequilibradora a nivel emocional, ya que ha coincidido con lo que para muchos parecía el final de la pandemia. Con la vacunación avanzando a pasos agigantados, las mascarillas como complemento voluntario, si se puede respetar la distancia, y la pequeña apertura del ocio nocturno, fueron muchos los que dieron por hecho que el coronavirus estaba llegando a su fin, pero no ha sido así.
Los altibajos emocionales siempre han formado parte de nuestra vida, pero la situación actual provoca un estado en el que sus efectos son todavía más intensos, y que los padezcan personas que no están acostumbradas a vivir sumidas en esta montaña rusa emocional.
¿Cómo gestionamos esta situación?
Quizás la primera medida que ayuda a restablecer el equilibrio tan deseado, sea aferrarnos a los planes de futuro. Esto es precisamente algo que pende de un hilo por culpa de la pandemia, pero pensar en aquello que te hará feliz cuando todo acabe es una buena forma de sobrellevar mejor una situación tan compleja como esta. Eso sí, no pongas fecha a tus planes, porque si se acerca el plazo y no ves el fin de la pandemia la respuesta será aun más negativa.
El apoyo psicológico es otro punto fundamental. Puede ser algo tan simple como el hecho de hablar con un familiar o un amigo sobre tus emociones, tus deseos y frustraciones. Si crees que necesitas algo más te recomendamos que acudas a un profesional. Es muy importante ser consciente de cuándo es el momento adecuado para recurrir a los profesionales.
No debemos olvidar otro elemento que contribuye a regular ese desequilibrio emocional, es la actividad física. Cuando cuidamos nuestro cuerpo, cuidamos nuestra mente, por eso es importante obligarse de alguna manera a convertir en rutina la practica de ejercicio, descansar correctamente, complementar esta actividad con una alimentación equilibrada y saludable, evitar el consumo excesivo de sustancias perjudiciales como el alcohol o el tabaco, etc.
Para acabar, como última pauta para gestionar la situación actual será fundamental resolver los pensamientos negativos que invaden nuestra mente. Es decir, no solo es suficiente tratar de mantener una actitud positiva, sin antes resolver el malestar que nos provoca esta carga emocional. Hemos de encontrar el hándicap y resolverlo para poder avanzar en nuestra salud mental.
La sobreinformación es tu peor enemigo
Esto se advirtió en su momento y continúa siendo un factor fundamental de descontrol emocional y es que la sobreinformación solo favorece al aumento del cuadro de ansiedad y depresión.
Además, hay que tener en cuenta que cuando consumimos demasiado información llegan los bulos. Las redes sociales han sido la principal fuente de bulos de la pandemia, porque es muy sencillo compartir algo que vemos sin contrastar su veracidad. Evadir toda esta información es el primer paso para salir del bucle de desequilibrio emocional.
¿Cuáles son las principales patologías que trae consigo la situación de pandemia actual?
Aunque hay muchas patologías desconocidas, que tiene su origen en la realidad de la pandemia, lo más común es que la población experimente altos niveles de ansiedad, depresión, estrés y en algunos casos índices de trastorno de bipolaridad. Así es, los cambios tan repetidos en nuestra actitud de cara a otras personas nos convierten en personas con trastorno de la personalidad, nos resultar complicado mantener una actitud positiva la mayor parte del tiempo, sin caer en los altibajos de emociones.
Desde Psicología y Bienestar te invitamos a contactar con nosotros si crees que estas viviendo una situación similar a la que describimos aquí. También puedes visitar nuestra web para conocer todas nuestras especialidades, desde psicología infantil, de pareja, familiar, etc.
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